El Carnaval de Cebreros es una parte importante de la historia costumbrista de Ávila e incluso de España, y una de las fiestas más importantes de la provincia de Ávila. Fue declarado Fiesta de Interés Turístico Regional en 2009.
La tradición e influencia de esta fiesta arraigó hace muchos años en Cebreros y la gente continuó con la celebración a pesar de las prohibiciones y los diferentes acontecimientos históricos. En los años 50, el Gobierno central intentó abolir el Carnaval en España, pero en Cebreros fue una tarea imposible. Los vecinos decidieron protestar frente a la casa del alcalde y celebrar el Carnaval, pero, para evitar problemas, se vistieron de luto, con ropas negras y pulseras, mientras se reunían en las casas para bailar y beber vino. Los niños se encargaban de vigilar y avisar si llegaba la Guardia Civil. Incluso el gobernador de Ávila, Vaca de Osma, tuvo que asumir que en Cebreros no se iba a cancelar el Carnaval, por lo que decidió suprimir las multas y cambiar el nombre por el de «Fiestas de Invierno». Sobre el origen del Carnaval de Cebreros no hay datos concretos, pero se considera que se celebra desde hace más de 200 años.
El disfraz, elemento básico del Carnaval, se ha ido modificando a lo largo de los años, desde el saco de esparto con el que se cubría la cara en el siglo 19th , pasando por los disfraces de ropa vieja adornados con cencerros, hasta el traje tradicional del pueblo compuesto por manteo y mantón de Manila para las mujeres y pantalón, chaqueta negra, faja roja y sombrero de pirolo para los hombres. En la actualidad, los trajes están más elaborados y son maravillosas piezas de costura, hechas a mano, con excelentes materiales, diseño y confección.
El Carnaval se celebra en grupos familiares y de amigos que además de disfrutar de los tradicionales desfiles, participan en el Desfile oficial de Carrozas y Comparsas los dos domingos de Carnaval, los días más importantes de la fiesta. El Desfile Provincial cuenta con más de 2.000 participantes y más de 20.000 personas que lo ven y disfrutan cada año.
Los domingos, lunes y martes tiene lugar el Baile Tradicional del Rondón. La Banda de Música Local interpreta la popular «Jota de Cebreros» y la gente forma un círculo alrededor de la Plaza en parejas de dos, uno frente al otro. «La Jota Cebrereña» se baila sin descanso durante un par de horas y su ritmo pegadizo no es difícil de bailar, lo que invita a todo el que lo desee a unirse a El Rondón, una peculiar tradición que se celebra desde hace muchos años.
El Carnaval de Cebreros es el resultado del gran trabajo de los vecinos, que dedican horas y horas de dedicación durante meses, año tras año. En el caso de las comparsas, diseñan y cosen los trajes y preparan los complementos, los bailes y las coreografías. Para la realización de las carrozas es necesario un verdadero trabajo de arquitectura, que permite la creación de obras de arte realistas; se realizan con todo tipo de materiales, incluida la electrónica desde hace unos años hasta ahora, que ha permitido introducir el movimiento en algunas de estas carrozas, convirtiéndolas en un verdadero espectáculo. Hay que añadir también el trabajo de confección de trajes y coreografías para las personas que acompañan a la carroza.